Tipo de proyecto: PICTO UNAJ 2022
Estado: En curso
Directora: María Laura Eberhardt
Integrantes: Juan Manuel Abal Medina, Sergio De Piero, Gustavo Dufour, Fernando Jaime, Lucila Nejamkis, Matías Triguboff, Facundo Nahuel Barragan, Roberto Berrozpe, Rosana Genole, Mauro Leguizamón, Néstor Martínez, Iván Massucci, Leonardo Pucheta, Laura Saavedra, Félix Sabaté.
Instituto: Instituto de Ciencias Sociales y Administración
Resumen:
El presente proyecto se enmarca en una línea temática prioritaria: la promoción de los derechos ciudadanos y el sondeo de la democracia en un área especialmente vulnerable del territorio argentino: la zona sur del conurbano bonaerense. Más específicamente, el partido de Florencio Varela. La importancia de la temática toma incluso mayor dimensión en un contexto de pandemia y pospandemia, en el que, por un lado, los indicadores económicos y sociales cayeron estrepitosamente en nuestro país (Ochoa y Albornoz, 2022) afectando más duramente a las zonas menos favorecidas, y, por el otro, la vigencia de las libertades cívicas se vio en parte empañada por las medidas adoptadas desde los diferentes niveles de gobierno para prevenir la expansión del virus. A lo anterior se suma que el foco está puesto en los/as jóvenes, a partir de los 16 años, un sector especialmente afectado por las medidas de aislamiento y en edad de iniciar su camino hacia el ejercicio de las facultades cívicas.
Desde comienzos del siglo XXI, y hasta el arribo de la pandemia, se vislumbraba en este país una tendencia creciente hacia la movilización social en general, ya sea para manifestar una opinión a favor o en contra de un proyecto de ley (como el de la interrupción voluntaria del embarazo), o para desaprobar algún acto de corrupción, o para exigir una mejora salarial, entre muchos otros motivos. Las modalidades informales, no institucionales o “espontáneas” de participación eran las más empleadas, al menos desde la crisis de 2001: cortes de calle, marchas, piquetes, acampes, cacerolazos, entre otras.
En ese marco, el protagonismo de la juventud venía en notable aumento, por un lado, a través de las llamadas “nuevas formas de participación juvenil” (Vommaro, 2013:115), esto es, “acciones colectivas” basadas en la “autoorganización de lo social” (:114), por el otro, a partir de un renovado interés por las instituciones tradicionales, en particular, los partidos políticos de más reciente creación (La Cámpora, Cambiemos) (Vommaro, 2013:115; Tagina, 2015).
Sin embargo, la repentina llegada de la pandemia Covid-19 a fines de 2019 puso un fin abrupto a estas tendencias, no solo en la Argentina sino también en todo el mundo. Las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio decretadas por los distintos niveles de gobierno pusieron en suspenso varias libertades individuales y colectivas, hasta el momento vigentes, como ser: la de circular, la de comerciar, la de reunión y asociación, la de educación, la de manifestación, y hasta la de expresión, limitada a partir del constante uso del barbijo.
En este nuevo contexto, la participación ciudadana en general y, particularmente, la de los/as jóvenes de las regiones más postergadas del territorio argentino, sufrieron importantes modificaciones, innovaciones y retrocesos (Vázquez et al, 2021), los cuales comportan un genuino interés de investigación a la luz del pleno vigor del marco democrático de gobierno.
